Cuando pensamos en vacaciones épicas—o cualquier tipo de vacaciones—enseguida pensamos: ¡Clinch, caja! Todos dicen que quieren viajar más pero gastar lo menos posible día tras día para ahorrar para un gran viaje no siempre es algo realista. El viaje económico, sin embargo, ha evolucionado en la última década, y mucho. Si bien una opción sigue siendo ir por todo el mundo con una mochila y trabajar, hay muchas ideas más creativas para aquellos que viajan con lo mínimo de dinero, solos o con su familia.

Hay muchas razones para viajar, desde ir a lugares exóticos que queremos conocer antes de morirnos hasta marcar hitos importantes, como una graduación o un compromiso de boda. Ya sea un simple /n de semana de vacaciones o un viaje por Indonesia, el momento perfecto para viajar puede ser antes de tomar un empleo nuevo, de cambiar de universidad o de ponerse de novio, que son las transiciones naturales de la vida cuando la gente siente que necesita irse a otro lado.

Antes de resolver a dónde ir y cuando, los futuros viajeros necesitan tener una idea de lo que quieren gastar. Un vistazo a las rutinas semanales nos dice dónde podemos recortar. Desde dos cafés gourmet diarios hasta almuerzos y tragos caros después del trabajo, siempre hay formas de reducir el gasto. Ahorrar dinero en unos pocos meses puede ser suficiente para pagar un viaje relajante.

¿Busca llegar al viajero ahorrativo? Con mochilas y hostales o sofás en casas de familia y casas rodantes, lo podemos ayudar a ilustrar el estilo de vida del viajero gasolero.